Autocaravanistas: turistas de calidad a prueba de dificultades

Les preguntas a los autocaravanistas de Galicia cuál es el área de estacionamiento en la que prefieren pasar unos días con sus vehículos, y la respuesta no tiene nada que ver con ninguno de los muy masificados lugares de veraneo la costa: Baralla, Lugo. Es uno de los datos que se desprenden la Encuesta de Hábitos y Percepciones de Autocaravanistas que desde la Asociación Galega de Autocaravanas, AGA, realizamos por segundo año consecutivo. El estudio vuelve a demostrar algo que hace tiempo venimos tratando de contar a administraciones públicas y entidades responsables del turismo de toda Galicia: el autocaravanismo genera un modelo desestacionalizado de turismo, y atrae viajeros de medio y alto poder aquisitivo que dejan ingresos en zonas geográficas muy dispersas. Crear mejores condiciones para los autocaravanistas, áreas ac de calidad, es invertir en la atracción de un turismo sostenible y desestacionalizado.

La encuesta también revela que este verano buena parte de los autocaravanistas están modificando sus planes de viaje habituales para amortiguar la carestía del combustible. Pero que viajarán igualmente. O que pocos fueron los que en los primeros meses del año, con el gasoil ya por las nubes, dejaron de salir por Galicia con sus autocaravanas. Ahí seguimos. A prueba de estacionalidad y de dificultades.

Así que se vuelve a demostrar que el sector del autocaravanismo es una palanca para el turismo sostenible. Que aguanta más en épocas de dificultades. Que siempre es una buena apuesta. Y que obviar el potencial del autocaravanismo es un error.

Un ejemplo: mientras municipios como Baralla llevan años generando rentas en su población a través de la atracción de autocaravanistas, algunos otros siguen obviando el potencial de nuestra actividad. Así, durante todos esos meses en los que campings y hoteles están cerrados los principales destinos turísticos de Galifornia, cientos de autocaravanistas del norte de Europa, en muchos casos personas jubiladas, recorren Galicia. Y a la hora de elegir dónde parar, buscan unos servicios y comodidades básicas. Municipios que no ofrecen estos servicios renuncian a atraer ese turismo más que de paso, por unas horas. Y tampoco les ofrecen soluciones para aparcar en verano, cuando la masificación de turismos en las carreteras lo complica todo. A veces incluso pasa que entonces, cuando llegan los meses de julio y agosto, algunos de los alcaldes de localidades costeras que siguen viendo el autocaravanismo como un mal a gestionar, no como una oportunidad, vincula el problema de tráfico en su municipio con las autocaravanas. Y eso en un país en cuyo parque móvil hay 100 turismos por cada autocaravana.

Hace más de dos décadas, cuando la Xunta de Galicia comenzó a construir el Xacobeo como gran reclamo turístico, en algunos municipios del Camiño Francés había críticas a lo que entonces les parecía “masificación” turística. Desde entonces, el número de viajeros ha crecido exponencialmente. Pero ya no se habla de masificación. Y eso porque decidimos en invertir para gestionar esa oportunidad. Como deberíamos hacer con el boom de las autocaravanas.Porque Galicia, si así lo quiere, puede tener mucho que decir y muchas visitas que atraer durante los 12 meses del año y cientos de lugares maravillosos de las cuatro provincias.